La felicidad, no es una posada en el camino… sino una forma de caminar por la vida!
Haz que tus pies te lleven por el camino más largo hacia la felicidad, son solo puntos en el mapa de la vida y el verdadero disfrute esta en buscarlos.
Que tus ojos reconozcan la diferencia entre un colibrí y el vuelo que lo sostiene, aunque se detenga, seguirá siendo un colibrí y es conveniente que lo sepas, para que no confundas el sol con la luz ni el cielo con la voz que lo menciona.
Que tus manos se tiendan generosas en el dar y agradecidas en el recibir…y que su gesto más frecuente sea la caricia para reconfortar a los que te rodean.
Que tu oído sea tan fiel a la hora del reproche como debe serlo a la hora del halago, para que puedas mantener el equilibrio en cualquier circunstancia.
Que tus rodillas te sostengan con firmeza a la altura de tus sueños y se aflojen mansamente cuando llegue el tiempo del descanso.
Que tu espalda sea tu mejor soporte… y no la carga más pesada.
Que tu boca refleje siempre la sonrisa que hay adentro, para que sea una ventana del alma y no la vidriera de tus dientes.
Que tus dientes te sirvan para aprovechar mejor el alimento y no para conseguir la tajada más grande al compartir con otros.
Que la lengua encuentre las palabras más exactas para expresarte sin que te malinterpreten.
Que tus uñas crezcan lo suficiente para protegerte, sin necesidad de lastimar a nadie.
Que tu cabello le de abrigo a tus ideas que siempre adornan más que un buen peinado.
Que tus brazos sean la cuna de los abrazos y no camisa de fuerza para nadie.
Y por fin… que tu corazón toque su música de amor para que tu vida sea un paso del universo hacia adelante…
Reciban todos mis lectores esta hermosa reflexión, que recogí en mi diario caminar por el jardín y apreciemos el valioso tesoro, que quizá por la velocidad del tiempo, aún no nos hemos dado cuenta, que desde que nacimos poseemos.
Mi deseo es que la conserven, cual sencillas flores perfumadas y perennes y sea útil en sus vidas y de alguna manera sirva para que logren alcanzar sus sueños.
Con mucho respeto y mi cariño,
lolita